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2011: ¿Sigue siendo Apple innovadora?

Steve ha dejado Apple temporalmente. La cotización de las acciones han bajado ligeramente al saberlo y la duda de si la empresa de la manzana mordida seguirá siendo igual ha saltado hasta en la prensa cotidiana. Es curioso ver como la empresa considerada más innovadora por diversos medios (Fortune o Businessweek por ejemplo) en los últimos años se ha convertido en un motivo de tertulia y extensos artículos en la prensa no especializada.

No es la primera vez que Steve Jobs deja la empresa. Lo hizo por motivos de salud un par de veces en 2.004 y 2.009, pero lo que muchos no saben es que, durante largos años, Steve no estuvo al frente de Apple. Y es de desear que, si fuera el caso, le vaya mejor a la compañía de Cupertino que la primera vez que pasó. De ahí las razonables dudas sobre el impacto de su retirada (temporal de momento) del liderazgo de Apple.

Repasando de forma breve la historia de Apple, uno percibe su enorme capacidad de aprender para seguir innovando y reinventarse. Steve fundó Apple en un garaje en California a mediados de los años setenta y tras el lanzamiento del mítico ordenador personal Macintosh (el primero con Mouse, compacto y menú por ventanas entre otras muchas innovaciones) la empresa llegó a una situación complicada hacia 1.985.

Su principal competidor entonces, IBM, había lanzado un producto menos bueno en términos de calidad y usabilidad, pero más competitivo y que se había posicionado como el estándar de la industria. Steve tuvo que dejar la compañía y salió por la puerta pequeña, despedido por John Sculley, el CEO que 2 años antes él mismo había traído de Pepsi. Durante sus años fuera de Apple fundó NeXT, compra Pixar (a Lucasfilm) para acabar como consejero de Disney.

En 1.997, el Consejo de Apple volvió a llamar a Steve. A su regreso tuvo que poner orden a la empresa y dinamizar su espíritu innovador de nuevo. En 2.001 iPod y iTunes, en 2.007 iPhone, en 2.010 iPad y el resto lo conocemos todos, aunque la suerte fue para aquellos que recogieron los frutos de una acción que se multiplicó por 10 ¡¡¡¡en 5 años!!!!

Ahora la pregunta es si Apple es lo que es por su capacidad de innovación, ¿sabrá mantenerla?, ¿la capacidad de innovar de Apple se debe a Steve Jobs principalmente? Indudablemente, Steve es un visionario; se le atribuye la frase “no puedes salir y preguntar a la gente sobre cuál va a ser el próximo gran producto” o “no hacemos investigación de mercado. No contratamos consultores. Lo único que nos interesa es diseñar productos fantásticos”.

La clarividencia y la visión estratégica son absolutamente claves en el rol de un buen CEO, muy especialmente en periodos de reinvención y crisis, y posiblemente por esto Steve Jobs fue escogido CEO de la década por la revista Fortune. De hecho, encontrar la senda del oro que se inicia con iPod, le costó unos 5 años y poner en marcha todo el modelo de negocio de iTunes-iPod fue arduo y complejo, como muestra el excelente documental de Discovery Channel.

Es cierto que además, los rumores cuentan que Steve tiene un liderazgo muy marcado y peculiar y que indudablemente esta habilidad ha ayudado a recorrer el camino con éxito, pero no hay que olvidar que tanto Steve como Apple han sufrido mucho en ese mismo camino. Lo refleja la participación de mercado de Apple en ordenadores que durante muchos años fue decreciente para acabar situándose en menos de un 5% a nivel mundial. De hecho, si leemos la prensa de mediados de los 90, veremos que el gran ganador era Dell. Apple había innovado en producto y Dell en modelo de negocio, y por aquel entonces, las cosas le iban mucho mejor a Dell. Newton fue otro gran fracaso de Apple (incluso algunos necesitaréis buscar en Goole ;-)).

Resumiendo, una característica de Apple es su capacidad de aprender y reinventarse. Y esta característica no es de una sola persona. Es propia de una cultura innovadora.

 

Por otro lado, Steve nunca ha estado solo. Desde sus inicios le acompañó Steve Wozniak, menos mediático pero el cerebro pensante y tangibilizador de la visión de Steve. De hecho muchas empresas de éxito están lideradas por tándems potentes. Es difícil romper moldes solo. Y hoy ya no es un tandem de locos apasionados (freakies que diríamos hoy) en un garaje. Es un equipo de unas 50.000 personas con destacados profesionales en sus diferentes áreas liderados por potentes directivos como Tim CookJonathan Ive o Phil Schiller, ente otros.

Muchas empresas han tenido líderes carismáticos que las han marcado o transformado y luego han seguido siendo innovadoras y exitosas. G&E o 3M son buenos ejemplos de ello. Y la clave está en que el líder tenga la estabilidad y la visión necesaria durante sus años al frente de la organización para implantar una cultura innovadora que le sobreviva. Una cultura que sea compartida por el equipo y que les permita encontrar la cohesión que el mercado requiere. Una cultura que ayude a perpetuar el ciclo virtuoso de seguir creando nuevas categorías con éxito. Una cultura que siga empujando el carácter emprendedor de Apple.

Porque el mayor riesgo que Apple corre es dormirse en sus éxitos pasados. Desgraciadamente algunas empresas han pasado por esto y recuperar el camino perdido es siempre muy complejo. Las empresas con una cultura innovadora de verdad siguen potenciando el espíritu emprendedor y que sus equipos asuman riesgos (calculados, eso si). Si Steve ha hecho bien su trabajo, lo que el mismo dice en su ya mítico discurso en Stanford visto por millones de personas en YouTube: “sigue hambriento, sigue alocado” seguirá marcando la cultura de Apple. Y de momento los analistas auguran excelentes resultados y perspectivas para Apple.

Este post fue publicado originalmente en el blog de Esadecreapolis

 

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